El fármaco de prescripción Pradaxa es utilizado para reducir el riesgo de un derrame cerebral en personas que sufren de fibrilación auricular no valvular o AFib (por sus siglas en inglés). La AFib es una arritmia cardíaca muy común que puede causar palpitaciones e insuficiencia cardíaca, pero a menudo no presenta ningún síntoma hasta que es demasiado tarde. Puede aumentar la probabilidad de un derrame cerebral hasta siete veces y también puede causar desmayos, por lo que puede ser rápidamente fatal para aquellos que lo sufren. Desafortunadamente, este medicamento viene con sus propios efectos secundarios graves, algunos de los cuales son capaces de causar muertes.
Pradaxa es el nombre comercial del medicamento Dabigatrán. El Dabigatrán inhabilita la capacidad de la sangre para coagularse por inhibición de la enzima trombina. Esta proteína es una parte esencial de la respuesta de coagulación de la sangre cuando el cuerpo sufre una lesión o hematoma y sintetiza otra proteína llamada fibrina. Esta proteína, cuando se enlaza en forma de polímero, actúa como una malla que aglutina las células sanguíneas. Normalmente, esto es esencial para prevenir una pérdida masiva de sangre durante una lesión o trauma, pero puede ser problemático cuando el cuerpo está teniendo problemas para controlar la respuesta de coagulación.
El Dabigatrán inhabilita esta enzima, evitando que se formen estructuras tipo malla en el sistema cardiovascular. Si bien esto puede evitar que la coagulación bloquee el flujo en las arterias y venas, el Pradaxa lo hace de una manera que puede causar complicaciones graves.
La complicación principal es la hemorragia excesiva, que es resultado de que la sangre sea diluida por el Dabigatrán. Uno de cada 10 pacientes sufrirán esto en cierto grado mientras toman el medicamento, y si bien es cierto que provoca menos casos de pérdida excesiva de sangre que los medicamentos similares, también es cierto que es más probable que cause una hemorragia en el GI que cualquier otro inhibidor. Esto es especialmente común en personas mayores de 75 años, como es la hemorragia extracraneal grave. La Food and Drug Association ha confirmado estos hallazgos y ha afirmado que es más probable que Pradaxa cause estos problemas que otros anticoagulantes. El fabricante del medicamento, Boehringer Ingelheim, afirma que 260 personas murieron a causa de complicaciones debido a este fármaco entre marzo de 2008 y octubre de 2011. La advertencia de la FDA es aún más importante para las personas que tienen problemas renales o úlceras estomacales, o aquellos que toman otros medicamentos como la aspirina que puede diluir la sangre.
Puede ser difícil determinar si el medicamento está causando algún efecto adverso, pero hay algunos síntomas a los que se les tiene que prestar atención y que pueden ser una señal de complicaciones internas. Dichas complicaciones incluyen hemorragias nasales regulares, tos con sangre, heces de color rojo o negro, orina descolorida o sangrado menstrual abundante. El usuario debe mantener una estrecha vigilancia de estas complicaciones ya que es difícil probar la cantidad de Pradaxa en el organismo de una persona.
Cualquier persona que haya tomado este medicamento y haya experimentado un sangrado severo u otras complicaciones derivadas del mismo debe ponerse en contacto con un abogado de lesiones causadas por fármacos tan pronto como sea posible. Puede ser difícil para cualquier persona lograr una indemnización de una empresa farmacéutica poderosa, pero un experto familiarizado con la industria puede ser un aliado valioso. Para la víctima, el abogado emparejará el campo de juego y ayudará a la parte agraviada a recopilar toda la información necesaria para armar un caso sólido.